La terminación de un pozo petrolero es un proceso operativo que se inicia después de cementada la última tubería de revestimiento y se realiza con el fin de dejar el pozo produciendo hidrocarburos o taponando el mismo si así se determinara. El objetivo primordial de la terminación de un pozo es obtener la producción óptima de hidrocarburos al menor costo.

Para que esta se realice debe hacerse un análisis nodal para determinar que instalación de producción que este acorde a los requerimientos del sistema. En la elección del tipo de terminación deberá considerarse la información recabada, indirecta o directamente durante la perforación, a partir de muestras de nucleos, pruebas de formación, análisis petrofísicos, análisis PVT y los registros geofísicos de exploracón.

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