Repsol prevé reducir sus inversiones en exploración de hidrocarburos un 35 % este año como parte de una revisión del plan de inversiones relacionado con el "entorno actual" de bajos precios del crudo, ha explicado hoy el consejero delegado de la compañía, Josu Jon Imaz, en una conferencia con analistas.

La inversión prevista para el área de "upstream" (exploración y producción) este año se sitúa en torno a 2.700 millones de dólares (2.400 millones de euros), un 28,9 % menos que en 2014, centradas en sus proyectos en Brasil, EEUU y Argelia, entre otros países.
Esta reducción de inversiones consistirá fundamentalmente en una mejora de la eficiencia y una ralentización de algunos proyectos no estratégicos, entre los que figuran los relativos a hidrocarburos no convencionales en los Estados Unidos.

Esta contención de inversiones se podrá "optimizar aún más" tras la adquisición de la petrolera canadiense Talisman, operación que Repsol espera cerrar antes de junio.

Tras la integración de ambas compañías, la estrategia para la división de "upstream" se centrará en eficiencia y creación de valor, ya que no hay nueva necesidad de crecimiento.

Así, más de la mitad del recorte de inversión se corresponderá a nuevas exploraciones, debido, además de a la incorporación de Talisman y a los precios del petróleo, a la "intensa campaña" llevada a cabo a lo largo de 2014.

A pesar de este recorte, Repsol prevé incrementar su producción entre un 6 % y un 7 % este año con respecto a 2014, excluyendo en ambos casos el efecto de Libia -cuyos pozos se encuentran parados desde noviembre por problemas de seguridad-.

Mientras tanto, la inversión en "downstream" -refino y comercialización- rondará 970 millones en 2015, centrada en la implementación de planes de eficiencia y la mejora de la refinería Pampilla, en Perú.

Con respecto a la comercialización en España y Portugal, Imaz ha apuntado que creció en 2014 y que espera que el consumo continúe al alza este año en línea con la mejora económica.

Ha subrayado que la compañía se encuentra "cómoda" en Venezuela incluso aunque se devalúe el bolívar y que estudia "diferentes alternativas" para su planta de regasificación Canaport, ubicada en Canadá, que "en ningún escenario" pasa por realizar una inversión significativa.

Umaz ha insistido que la adquisición de Talisman es una operación "transformadora" para la compañía, que cumple con todos sus requisitos de inversión y que les va a permitir mejorar su balance entre "upstream" y "downstream", al tiempo que crear valor para los accionistas.

Así, a lo largo de este año se presentará un nuevo plan estratégico, en el que se recogerá la integración con Talisman.

Con respecto a dos de las operaciones asociadas a la financiación de la compra de la petrolera, la emisión de 5.000 millones de euros en bonos híbridos y desinversiones por 1.000 millones, Imaz ha apuntado que "no hay prisa" porque "podríamos pagar la totalidad de la transacción de Talisman con el efectivo que tenemos en nuestros bolsillos".
El consejero delegado ha subrayado que tras la compra de la petrolera se mantendrá la remuneración a los accionistas en el nivel actual.