"Queremos crecer en Brasil. Es una decisión estratégica en el sentido literal del término. (...) Dejaremos de invertir en otros lugares del mundo para hacerlo en Brasil", afirmó Rabilloud, número uno del grupo en el gigante sudamericano.

La decisión de la petrolera francesa se produce tras el anuncio de la compra, la semana pasada, de yacimientos de Petrobras en la zona del Presal y de una participación de 50% en dos centrales de cogeneración de energía, por 2.200 millones de dólares.

El acuerdo, firmado el miércoles con la empresa petrolera estatal brasileña, abarca tanto la prospección como la producción y permitirá a ambas compañías reducir costos en momentos en que el precio del barril está bajo, señala Valor Económico.

También permitirá a Total aumentar su participación en el mercado petrolero brasileño, donde maneja cinco filiales que emplean a 2.500 personas, y abrir camino a la comercialización de gas natural y de la producción de energía eléctrica.

"Vamos a continuar dialogando con Petrobras para hacer otras cosas juntos", agregó Rabilloud.