Las ganancias de la petrolera Royal Dutch Shell subieron en casi un tercio en el tercer trimestre, superando las expectativas y sumándose a un sólido periodo de tres meses para las grandes petroleras europeas, que todavía deben sentir el impacto de un fuerte descenso en los precios del crudo.

La mayor petrolera de Europa por valor de mercado también dijo que había nombrado al ex presidente del directorio de Bank of America, Charles Holliday, como su presidente. Holliday reemplazará a la actual presidenta de la empresa, Jorma Ollila, en el 2015.

Las ganancias estructurales de Shell alcanzaron 5.800 millones de dólares en el tercer trimestre, un alza de 31 por ciento respecto a igual periodo del año pasado, y la petrolera mantuvo su dividendo gracias a que tanto la división de explotación y comercialización como la de refino entregaron sólidos resultados.

No obstante, las ganancias cayeron respecto al segundo trimestre del año, debido mayormente a los débiles precios del petróleo.

Las acciones de Shell en Londres se negociaban estables temprano en la sesión.

Los precios del crudo han caído más de un 20 por ciento en los últimos cuatro meses a mínimos de cuatro años cerca de 85 dólares por barril ante una desaceleración en la demanda global particularmente en China y abundantes suministros, restando miles de millones en valor de mercado a las compañías petroleras.

El petróleo Brent, no obstante, promedió 103 dólares por barril en el tercer trimestre. Y dado que el reciente descenso fue el más pronunciado en las semanas posteriores al fin del tercer trimestre el 30 de septiembre, las petroleras no han sufrido por ahora los daños que impactarán en los resultados del cuarto trimestre.

Los sólidos márgenes de refinación como resultado de los bajos precios del crudo también ayudaron a las ganancias. Las utilidades de la división de refino de Shell en el tercer trimestre se duplicaron a 1.800 millones de dólares respecto al año pasado y subieron un tercio frente al segundo trimestre.

Otras petroleras europeas como BP, Total y Eni han cumplido o superado los pronósticos de analistas en el tercer trimestre.