El presidente de la República, Rafael Correa, explicó que solo el 10% del presupuesto del Estado para el 2015 tiene como origen los ingresos por venta de petróleo, con lo que esta nación suramericana deja la dependencia petrolera que marcó su economía en décadas pasadas.
En su enlace semanal de rendición de cuentas, el mandatario ecuatoriano destacó que el ingreso bruto por concepto de la actividad petrolera para el 2015 será de 16.960 millones de dólares calculados a un precio de 79 dólares por barril. De estos recursos, apenas ingresarán al Presupuesto General del Estado 3.148 millones.
“Es mentira que por eso (ingresos petroleros) hacemos las carreteras, hospitales, unidades educativas, sino por una acertada renegociación de la deuda externa, eficiente recaudación de impuestos y renegociación de los propios contratos petroleros. Esto demuestra cómo Ecuador deja la dependencia petrolera”, manifestó el presidente.
Correa subrayó que de los ingresos petroleros, 4.183 millones de dólares se destinan a la compañía Petroamazonas en costos de producción y nuevas inversiones; mientras que Petroecuador, que se encarga de la refinería y distribución, consume 1.573 millones de dólares.
Además, otros 785 millones de dólares se destinan a los municipios amazónicos, de donde se extrae el crudo, de acuerdo con lo que estipula la Ley 010, creada por este gobierno. También otro rubro de 1.520 millones de dólares se utiliza para el pago a petroleras privadas por los contratos de prestación de servicios. Pero el gasto más oneroso es la importación de derivados (combustibles) que significa 5.785 millones de dólares.
Con estas cifras, que el mandatario pidió publicar en la página web de la presidencia (www.presidencia.gob.ec), se desbaratan las teorías de analistas económicos de oposición que insisten en señalar que la principal fuente de ingresos del gobierno ecuatoriano se derivan de las actividades petroleras.