Genel Energy acaba de concluir sus pruebas de producción de hidrocarburos a 180 kilómetros al noreste de Lanzarote, en uno de los permisos de exploración otorgados por Marruecos, donde ha encontrado petróleo de tipo ligero —26 grados API—, lo que constituye la más importante novedad reseñable, ya que hasta el momento solo se había hallado petróleo pesado y sin utilidad comercial.
Según fuentes de uno de los socios de Genel en estas prospecciones, Serica, los trabajos en Sidi Moussa-1 (a la altura de Sidi Ifni) «han ofrecido muy valiosa información sobre el futuro de esta licencia». La presencia de petróleo «de buena calidad» encontrado en este pozo —a 2.825 metros de profundidad— «anima a continuar con los siguientes pasos en este sondeo», afirma Tony Craven, consejero delegado de Serica.
Las tareas pendientes, a través de un sondeo de evaluación de extensión lateral, son fundamentales antes de saber si lo que se ha encontrado es explotable comercialmente. «Queda por delante una prueba sísmica de 3D de detalle, ya que con un solo pozo no se puede deducir si es comercial», explica Antonio Afonso, geólogo especializado en exploración petrolífera.
Por otra parte, ya se encuentra camino de la zona delimitada por el permiso Gargaa-1 el buque de posicionamiento dinámico «Atwood Achiever», tras su trabajo exitoso en el pozo Jubilee (Ghana), para tomar posición en este pozo, que se encuentra al sur del bloque Cabo Bojador, dentro de la cuenca de El Aaiún y, por tanto, en aguas del Sahara, a unos 280 kilómetros al sur de Gran Canaria.
El barco de Repsol llega a la zona
El barco contratado por Repsol para llevar a cabo los sondeos petrolíferos al este de Lanzarote y Fuerteventura, el Rowan Renaissence, tenía previsto llegar este sábado a la zona en la que en una semana se prevé que comience la investigación. Fuentes de la compañía informaron a Efe de que el sector donde se iniciarán las prospecciones cuenta, desde hace dos días, con un radio de exclusión marítima de una milla náutica de seguridad que, dictaminado por la Marina Mercante, impide el tránsito de buques mientras se realicen los trabajos. «Si hay alguien que no lo respeta, entendemos que la autoridad deberá tomar medidas porque, evidentemente, se pondría en riesgo la seguridad de la operación», han advertido las fuentes. La alusión se refiere a la «Flota Sandía», de activistas que pretenden parar los sondeos con su presencia en la zona.