El gigante petrolero francés Total decidió cerrar 9 de las 19 filiales que posee en paraísos fiscales en lo que parece constituir una operación de comunicación destinada a mostrar un perfil de mayor transparencia.
En 2014 Total ocupaba el 12° lugar en el "ranking" mundial de empresas petroleras con un nivel de producción global de 2.6 millones de barriles diarios, según el sitio especializado "WoodMackenzie".
La repatriación de las 9 filiales se hará antes de fines de 2016, pero no podrá cerrar las otras 10 que mantiene en paraísos fiscales por "razones operativas o jurídicas", indicó en un comunicado difundido en su página web. Al mismo tiempo, dio a conocer la lista completa de sus 903 filiales consolidadas en los 130 países en los que opera para "disipar cualquier malentendido".
Esa lista, por ejemplo, incluye más de 200 filiales en Francia, 45 en el Reino Unido, 11 en Canadá, unas 60 en Holanda, 15 en Bermudas, 3 en las Islas Caimán y 3 en Luxemburgo.
Hasta ahora solo se conocía oficialmente la existencia de unas 200 filiales.
"Para un gran grupo tan vasto como Total, que tiene operaciones en 130 países, es natural tener numerosas filiales por todo el mundo. Su diversidad es el reflejo de la variedad de nuestras actividades", explicó el responsable ejecutivo, Patrick Pouyanné, que dirige la empresa desde octubre de 2014. En ese momento reemplazó a Christophe de Margerie, que murió en un accidente de aviación en Moscú.
La compañía aseguró que abandonó la práctica de implantar filiales en países considerados como paraísos fiscales y prometió que va a retirar las que aún posee "tan rápido como sea posible".
En 2012, recordó, eliminó un primer lote de 14 filiales que operan en países o territorios de fiscalidad privilegiada.
La decisión de Total parece responder a la creciente presión manifestada por la opinión pública contra las empresas que recurren a esos métodos por razones de "optimización impositiva". Esa práctica consiste en declarar los beneficios de las empresas multinacionales en jurisdicciones con una fiscalidad más ventajosa.
Cumpliendo con directivas impartidas por el G-20, la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) trabaja intensamente para eliminar ese tipo de prácticas entre las empresas de sus países miembros.
Pocas horas antes, en una entrevista publicada en el diario "Le Parisien", el presidente francés François Hollande había criticado abiertamente a Total por evitar pagar impuestos en Francia mediante el recurso a la "optimización fiscal".
"Total, que es la mayor empresa francesa, debería como tal ser el mayor contribuyente francés. Los beneficios generados en Francia deben pagar impuestos en Francia", precisó.
Hollande señaló que para evitar "esas derivas" con las multinacionales, Francia, Estados Unidos, Alemania y el Reino Unido acordaron crear una tasa de 3 por ciento sobre los dividendos que pagan las empresas con sede en Francia.