ExxonMobil confirmó el miércoles una reducción del 25% de sus inversiones en 2016, a 23.000 millones de dólares, ante la caída de los precios del petróleo, que se ha tragado los beneficios de las grandes compañías petroleras.
"Nos enfocaremos en la maximización de las ganancias en toda la cadena" productiva, explicó el director ejecutivo de Exxonmobil, Rex Tillerson, citado en un comunicado.
Esta cantidad afectará particularmente a los recursos dedicados a la exploración petrolífera y gasífera, que incluye el desarrollo de actividades de perforación, de plataformas, terminales y yacimientos.
ExxonMobil ya había reducido en 20% sus inversiones en 2015.
Esta decisión no es realmente una sorpresa, a pesar de que la actividad de exploración petrolera es la principal fuente de beneficios del grupo. Esa división de actividad enjugó pérdidas en Estados Unidos en el cuarto trimestre a causa de la caída del precio del petróleo.
Los precios del petróleo se redujeron en 2015 alrededor de un 31% en el mercado neoyorquino. Un 42% de esa caída se produjo en el último trimestre del año, el peor para la rentabilidad de las empresas del sector energético.
Aunque reducirá sus costos, ExxonMobil no ha decidido ceder activos ni suprimir empleos para enfrentar la baja de los precios del crudo, contrariamente a lo que han hecho sus principales competidores (Chevron, Shell, Total, BP).