La crisis de liquidez que enfrenta Pemex para nueva producción de petróleo y su decisión de suspender yacimientos que no sean rentables, abrió oportunidades de negocio para la iniciativa privada mediante alianzas con la empresa productiva del Estado.
Expertos destacaron que en el área de aguas profundas, Pemex puede encontrar entre sus aliados a las multinacionales Royal Dutch Shell, Exxon y Chevron. Para los yacimientos en aguas someras, que requieren tecnología más eficiente, podrían estar las mexicanas Alfa y Grupo México.
“Esto puede acelerar la instrumentación de la reforma energética creando un mercado secundario de yacimientos petroleros donde empresas interesadas en extraer petróleo en México ya no se tengan que esperar a las licitaciones de la Ronda Uno”, dijo el presidente de la Asociación Mexicana de Empresas de Servicios Petroleros (Amespac), Ernesto Marcos Giacoman.
Shell es una empresa petrolera europea con más de 50 años de presencia en México, donde participa en distintas áreas, que van desde la importación y comercialización de gas natural licuado, hasta servicios de consultoría en el sector hidrocarburos para la región Latinoamérica.
La firma que lidera Alberto de la Fuente en México cuenta con 31 mil 752 millones de dólares en caja, así como un apalancamiento de 1.14 veces deuda neta a EBITDA, lo cual es sano para participar en las licitaciones del sector de hidrocarburos, cuya media anda en 2.5 veces.
“Estamos considerando realizar joint-ventures con Pemex para aprovechar las oportunidades. También revisaremos posibles alianzas con otras compañías en gas y petróleo”, expuso en entrevista previa Marvin Odum, director de Shell Américas.
ExxonMobil cuenta con más de 130 años de operaciones en México y tres líneas de negocio: exploración y producción, refinación y petroquímica. Sus oficinas corporativas y la planta de lubricantes están ubicadas en la Ciudad de México. Además, maneja una terminal química en Tuxpan, Veracruz.
La petrolera estadounidense que en México encabeza Enrique Hidalgo, tiene un capital disponible de 3 mil 705 millones de dólares, con un apalancamiento de 1.13 veces.
Y en tercer lugar de las extranjeras está Chevron, la cual en México tiene el negocio de la distribución y comercialización de lubricantes, además de que es uno de los operadores principales de campos en el Golfo de México (del lado de Estados Unidos). Dispone en caja de 11 mil 332 millones de dólares, y un apalancamiento de 1.57 veces deuda neta a EBITDA.
Vanessa Quiroga, analista de Credit Suisse, dijo en un reporte reciente que la transformación de Pemex debe estar acompañada de alianzas, destacando a firmas locales como Alfa, de Armando Garza Sada.
A través de su subsidiaria Newpek, Alfa maneja campos de gas en tierra y tiene convenios con Pemex. Cuenta en caja con mil 442.5 millones de dólares para inversiones y pese a que su apalancamiento es de 2.29 veces deuda neta a EBITDA, ve atractivo sacar petróleo en México.
Grupo México, de Germán Larrea, opera plataformas petroleras para Pemex vía Jack Ups y tiene acceso a tecnología para explorar y extraer hidrocarburos en tierra y aguas someras. Su posición de efectivo es de 2 mil 690 millones de dólares y registra un palancamiento de 1.36 veces.
PROYECTOS EN ALIANZA
Sobre los activos que Pemex podría poner en alianza con las empresas privadas, están los campos maduros que recibió en la Ronda Cero.
“Pemex no pondrá directamente recursos económicos, en virtud del ajuste presupuestal derivado de su problema de liquidez, sino que su participación en dichas asociaciones se dará fundamentalmente con las asignaciones que se le hicieron en la Ronda Cero para buscar socios que le permitan desarrollar los proyectos de exploración y producción”, contestó la empresa a El Financiero por correo.
Entre dichos proyectos están los Fam-Outs de crudo extra pesado, en aguas profundas y en el área Perdido (Campeche), todas con inversiones estimadas de 32 mil 200 millones de dólares. “El problema será el tipo de contrato, las empresas necesitan seguridad en el tipo de situación fiscal”, dijo el presidente de la Asociación Mexicana de Empresas de Servicios Petroleros.
José Antonio González Anaya, director general de Pemex, reveló recientemente ante legisladores que se ofrecerán nuevos contratos para facilitar y hacer eficiente la operación de los proyectos.
Algunos proyectos considerados en la lista de Farm-Outs son Bolontikú, Sinán y Ek, en la parte marítima; además de Rodador, Ogarrio y Cárdenas Mora, en el área terrestre. Ambos tienen reservas estimadas de 598 millones de barriles de petróleo.
Los campos de crudo extra pesado son Ayatsil, Tekel y Utsil con 747 millones de barriles; los de aguas profundas con gas natural son Kunah y Piklis con 212 millones, y en el área Perdido se tienen a Trión y Exploratus con 539 millones.