Los expertos señalaron que desde el comienzo de 2016, los precios del petróleo han oscilado entre u$s 27 y u$s 42 por barril, aproximadamente una cuarta parte del valor del crudo de 2008 cuando alcanzó un pico de u$s 145.
"En realidad, nadie sabe lo que los precios del petróleo van a ser en el futuro, pero creemos que los países y las empresas deben prepararse para verlo flotar alrededor de u$s 50 por barril en lo inmediato", señalaron Hartmann y Sam, quienes subrayaron que "históricamente esto no sería sorprendente en absoluto. De hecho, los precios actuales del petróleo que consideramos tan bajos están en realidad cerca del promedio de los últimos 150 años: u$s 35".
Precisaron que "el 16 de febrero, los ministros de petróleo de Arabia Saudita, Rusia, Qatar y Venezuela acordaron detener su producción en un intento por impulsar los precios", y remarcaron que "este fue un movimiento característico, durante décadas".
Si bien indicaron que "en reacción a este parate en la producción, los precios del petróleo subieron 5%", pusieron de relieve que el valor "rápidamente cayó por debajo de u$s 30".
A criterio de estos analistas, "el entorno de actual baja del precio del petróleo no es una crisis que será seguida por un boom en un futuro próximo".
"En cambio, parece que hemos entrado en una nueva etapa de precios más bajos del petróleo que afectarán no sólo a los productores de petróleo y gas, sino también a todas las naciones, las empresas y las personas que dependen de él", destacaron Hartmann y Sam.
Afirmaron que "durante la última década, los productores de petróleo y gas no convencionales estadounidenses fueron pioneros en un nuevo modelo de negocio que se rompió el enfoque de los operadores tradicionales".
En ese sentido, puntualizaron que estos productores de shale "mejoraron su tecnología de perforación y fractura, y pudieron aumentar la producción en tan sólo seis meses, a una pequeña fracción de la inversión de capital requerida por sus competidores convencionales".
Remarcaron que "esto ha permitido a la industria del petróleo de Estados Unidos, en su conjunto, pasar a producir aproximadamente 4 millones más de barriles de crudo al día de lo que hizo en 2008, cerrando la brecha con la producción de Rusia y Arabia Saudita".
Además señalaron que "en enero de este año, los Estados Unidos levantaron la prohibición de exportar petróleo, y los envíos partieron hacia los mercados globales, buscando retornos superiores a los obtenidos en su mercado local".
Al mismo tiempo, los expertos remarcaron que "varios otros países, como China y Argentina están comenzando a desarrollar sus recursos de gas y petróleo no convencionales, mediante la adopción de la tecnología y modelo de negocio, así como la construcción de un ecosistema cadena de suministro de la inversión y que es compatible con este desarrollo".
"Sudáfrica, China y Argentina también se están preparando para intentar desarrollar sus reservas en un intento de independencia energética", concluyeron.