Según la radio adscrita a la región meridional de Tataouine, escenario desde hace semanas de graves protestas similares, la actividad ha cesado en los campos de Baguel y Tarfa, información que la propia compañía ni ha conformado ni desmentido aún.
La situación es similar a la que sufrió la petrolera británica Petrofac (LON:PFC), que tras meses de protesta y casi un año sin poder funcionar con normalidad, anunció en 2016 su retirada de la explotación en la isla de Kerkena (sur de Túnez).
El país norteafricano, sumido en una grave crisis económica, ha sido escenario este año de casi medio centenar de huelgas y protestas en todo el territorio que han causado la caída de algunos ministros.
Las más graves se suceden desde principios de abril en Tataouine, donde los manifestantes tienen paralizada la actividad económica en protesta por la elevada tasa de paro y de pobreza de una región que consideran olvidada.
Hace dos semanas, los manifestantes rechazaron las medidas que ofreció personalmente el primer ministro, Yusef Chahed, que tuvo que abandonar la localidad entre disturbios y gritos de "fuera, fuera".
Desde entonces mantienen una sentada de protesta en contra de una propuesta que tildaron de "humillante".