El líder de facto de la OPEP, Arabia Saudita, está a favor de ampliar la reducción en el bombeo por nueve meses más en lugar de los seis meses sugeridos inicialmente para acelerar la búsqueda de equilibrio del mercado y evitar que los precios desciendan por debajo de los US$50 por barril.
El lunes, el ministro de Energía Khalid al-Falih logró el apoyo del segundo miembro más grande de la OPEP, Irak, para una extensión de nueve meses y dijo que no se esperan objeciones de otras naciones del grupo.
Kuwait, por su parte, dijo el martes que no todos los miembros de la OPEP estaban a favor de un ampliación de los recortes hasta marzo del 2018, pero que la mayoría de los delegados en Viena esperan una reunión sin sobresaltos a partir del jueves.
"La apreciación del ministro de petróleo saudí parece certera y no se esperan objeciones serias ", dijo uno de los delegados, que pidió no ser identificado porque no tiene autorización para hacer comentarios a los medios.
"No habrá sorpresas", comentó un segundo delegado.
Una tercera fuente añadió: "Creo que será una reunión cordial para extender los recortes a marzo del 2018 y ver qué pasa con el esquisto de Estados Unidos. Crecerá, pero hay límites", explicó.
La reunión de la OPEP en Viena analizará la posibilidad de prolongar el acuerdo alcanzado en diciembre en el que el bloque y 11 países productores fuera del cartel, incluyendo Rusia, concordaron en reducir la producción en 1,8 millones de barriles por día (bpd) en el primer semestre del 2017.