Tradicionalmente, la forma de reducir la produccion de arena ha sido reducir las velocidades de extraccion a partir de menores regimenes de produccion. Como la produccion de arena es normalmente en batches y sin responder a patrones predeterminados, decidir el regimen optimo de produccion sin contar con una evaluacion en forma continua y en tiempo real se transforma en una tarea de muy dificil implementacion.