La caída en la Legislatura de la prórroga de las concesiones de Petrobras en Río Negro llenó de incertidumbre el mercado petrolero de la provincia. Ello, sumado a la decisión del gobernador Alberto Weretilneck de no insistir en esa política, frenó lo poco que quedaba de los planes de inversiones de la decena de empresas que operan en el territorio y que están en condiciones de extender sus contratos.

La excepción, claro, es la estatal YPF, donde reina la certeza de que sus contratos continuarán luego de 2017, cuando operan casi todos los vencimientos.

En el mundo del petróleo y el gas las inversiones se planifican a largo plazo y no sólo porque las campañas tienen sus tiempos, sino también porque el recupero de las inversiones es a cuatro o cinco años.

Hay tres áreas en las que la falta de definiciones impide cualquier plan de inversión porque sus concesiones vencen en cuestión de meses: Agua Salada, en manos de Tecpetrol; El Santiagueño, que es operado por Yacimiento del Sur (ex-Apache, actual YPF); y Jagüel de los Machos, de la brasileña Petrobras. Las tres concesiones caerán el 9 de junio del año que viene. Están en el noroeste, la zona tradicionalmente petrolera de Río Negro, con Catriel como centro de referencia.

Ramiro Arceo, de la Cámara de Servicios Petroleros de Catriel, una entidad que agrupa a las pymes locales, confirmó que Petrobras bajó dos equipos de perforación. Uno quedó al parecer sin destino y el otro fue enviado a Río Neuquén, un yacimiento interprovincial ubicado más al sur.

Porque es su principal activo, Petrolera Entre Lomas (Petrobras y la estadounidense Apco) aparece como la más complicada. El 21 de enero de 2016 se extinguirá la concesión de su área Entre Lomas.

Arceo, que representa a un sector que da empleo a entre 2.500 y 3.000 personas, dijo que no entiende por qué Weretilneck no avanza con las negociaciones con otras empresas, sobre todo teniendo en cuenta que el vicegobernador Pedro Pesatti se inclinó por esa alternativa, luego de que la Legislatura rechazara el acuerdo con Petrobras.

Explicó que por ahora no se registraron despidos en la zona de Catriel, pero sí se observa una "leve declinación" con perspectivas de que la situación empeore.