Petróleos Mexicanos (Pemex) estudia las diversas opciones financieras que le abre la reforma energética con el fin de tapar vacíos en proyectos que podrían verse relegados ante la reconfiguración del gasto que ha debido realizar la petrolera desde este año como consecuencia de menores flujos provenientes del Gobierno.

Según el director de exploración de Pemex Exploración y Producción (PEP), José Antonio Escalante, la inversión en ese segmento disminuirá a cerca de 30,000 millones de pesos (mdp) para el siguiente año.

La cantidad es menor aún a los 31,499 mdp que se contemplaban para 2016 tras los recortes que realizó el Gobierno en meses anteriores, según datos de la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) en su presentación del plan de inversiones de Pemex para 2015.

De ahí que la petrolera busque auxiliarse de los recursos del sector privado con esquemas de contratos como sale and leaseback, a través del cual arrendará infraestructura de hidrocarburos cerca del litoral de Tabasco.

“Queremos incrementar las inversiones asociándonos con lo que el Consejo de Administración nos ha etiquetado un presupuesto adicional para invertir en la delimitación de yacimientos del orden de 3,500 a 4,000 millones de pesos”, que provendrán de este contrato, explicó Escalante, al término de una conferencia en las instalaciones del corporativo de la petrolera.

“Ahora se buscan las asociaciones con Pemex para que los particulares puedan financiar los proyectos, lo que va a reforzar su flujo de efectivo. Pero esto tiene riesgos y beneficios, pues entrará más dinero, pero van a tener que monetizar y compartir las ganancias de esa infraestructura”, dijo el analista de la consultora Solana y Consultores, Arturo Carranza.

Los llamados farm outs, que permitirán a Pemex conseguir socios para la explotación de yacimientos, se presentan como la mejor opción para las aguas profundas, donde la petrolera nacional tiene poca experiencia y tecnología, pero donde espera encontrar grandes recursos en el futuro.

“Creo que la coyuntura es buena para demostrar que se pueden hacer los farm outs ante las reducciones de inversiones que se dan en todo el mundo, y donde Pemex debe hacer lo propio”, opinó el especialista de la consultora FTI Consulting, Pablo Zárate.

La Secretaría de Energía y la CNH esperan lanzar la cuarta fase de la Ronda Uno a inicios del siguiente año, donde incluirán los primeros contratos para aguas profundas para privados, y donde Pemex también espera participar a través de los farm-outs.

Nuevos descubrimientos…para el futuro

Pemex logró identificar dos nuevos yacimientos de crudo en la región sur cercana a Tabasco, que junto a los cuatro que había anunciado con anterioridad en aguas someras, y tres más en aguas profundas –dos anunciados este año-,  incorporará reservas 3P por 1,050 millones de barriles de crudo equivalente (bce).

La petrolera conseguirá así una restitución de reservas de 85% para finales del año, por lo que las reservas totales caerán al terminar 2015 frente al año pasado, dado que en el año se habrán sacado un estimado de 1,300 millones de barriles.

“Aunque lo más importante son las probadas, porque eso te dan certeza, las reservas posibles implica que puedes afrontar el largo plazo con mejores expectativas”, dijo Carranza.

El directivo de PEP dijo que la mayor parte de las reservas de estos descubrimientos, una vez dictaminadas por la CNH, aportarán a las reservas posibles, que tienen un éxito comercial de apenas 10%, frente a las probables del 50% y las probadas del 90%.

“Entre los cuatro descubrimientos que hicimos en junio, más los dos que estamos anunciando, estimamos una producción de 140,000 barriles (de crudo)”, explicó Escalante durante la conferencia de prensa en el Corporativo de Pemex.

En cuanto a las de aguas profundas, la producción llegará en 8 o 7 años, debido a la complejidad de estos proyectos, si bien aportan el 60% de las reservas que se pretenden incorporar. En los yacimientos terrestres la producción puede llegar a finales de 2016, cerca de 5,000 a 8,000 barriles, aunque su aportación a reservas apenas será de 5%.

Pemex cerró noviembre con una producción de 2.27 millones de barriles, casi similar a la de octubre, aunque 6.3 por ciento por debajo de lo promediado en 2014, según datos preliminares de PEP.

La refinación es negocio conjunto

La petrolera estudia opciones para financiar negocios que hasta ahora tienen poca rentabilidad o pérdidas como la refinación, por lo que pretenden que el sector privado juegue un papel mayoritario en las inversiones de 23,000 millones de dólares (mdd) que se realizarán en este mercado en los siguientes tres años.

“El aumento en la producción está en el orden de los 250,000 barriles. Y con esto estaríamos nosotros tratando de reducir las importaciones entre 20% a 25%, si tomamos en cuenta que la demanda que tenemos es cercana a los 800,000 barriles diarios”, dijo el director general de Pemex Transformación Industrial, Alejandro Martínez Sibaja, en conferencia de prensa.

Ahora deben definirse la manera en que los privados pueden entrar a invertir en estos activos, pues además de los contratos de sale and leaseback existen otros vehículos financieros que pudieran atraer inversión privada.

“Hemos explorado la Fibra E, que trabaja o ha sido exitosa en Estados Unidos con los proyectos de transporte y almacenamiento. Lo estaremos trabajando en México para algunos de los proyectos de transporte que tenemos”, añadió Martínez.

La petrolera estudia además si se interesa por entrar al llamado nuevo Mercado Eléctrico Mayorista a través de la venta de energía limpia con la capacidad sobrante de las plantas de cogeneración que alimentan a sus refinerías, dijo el funcionario.

Si bien su fin principal es proveer de energía a estas instalaciones, existe un remanente que pudiera convertirse en Certificados de Energías Limpias (CEL) cuya primera licitación se lanzará a inicios del siguiente año.