El regulador del sector petrolero mexicano, la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH), iniciará un nuevo proceso para que las empresas que quedaron en segundo lugar en la puja por los campos adjudicados a las firma Geo Estratos, Strata y Serral, reúnan los requisitos para concretar los contratos.
En caso de que esas empresas no quieran o no puedan cumplir con los requerimientos, los campos permanecerían bajo resguardo de la petrolera estatal Pemex para volver a ser licitados, dijo el comisionado presidente de la CNH, Juan Carlos Zepeda.
De los seis contratos no firmados, tres eran para Geo Estratos, que fue en conjunto con Geo Estratos Mxoil Exploración y Producción en los campos Pontón, Tecolutla y La Laja, todos en el estado de Veracruz, con costas en el Golfo de México.
Otros dos campos habían sido adjudicados a Strata Campos Maduros: Ricos, con producción y ubicado en el estado de Tamaulipas, y Peña Blanca, en el estado de Nuevo León, ambos en el norte del país.
El sexto, San Bernardo, con producción y también ubicado en Nuevo León, había sido adjudicado a Sarreal.
Se espera que ahora la producción de hidrocarburos sea de unos 61,000 barriles de petróleo crudo equivalente (bpce), y no de alrededor de 70,000 bpce como se planeaba inicialmente en el pico en unos tres años.
México está ejecutando una ronda licitatoria de áreas y campos de hidrocarburos pese a la baja de los precios del crudo que ha llevado a Pemex a recortar su presupuesto y reducir su expectativa de producción de petróleo a 2.13 millones de bpd para este año.
El 5 de diciembre está previsto el anuncio de los ganadores de los contratos de 10 áreas de exploración y extracción en aguas profundas, la joya de la ronda licitatoria y en donde se presume que existe el mayor potencial de crudo y gas.
(Reporte de Adriana Barrera, editado por Patricia Avila)