Las ventas de petróleo de Teherán casi se han duplicado desde diciembre, el último mes antes del levantamiento de las sanciones por su controvertido programa nuclear, y el aumento de las ventas debería ayudar a contrarrestar parte de las actuales interrupciones globales de suministros.
Irán está obteniendo participación de mercado a un ritmo más veloz del que esperaban los analistas desde que las sanciones fueron eliminadas en enero, tras asegurar más buques petroleros a través de un arreglo temporal de seguros de embarque.
Los cargamentos de crudo y condensado para junio aumentaron unos 100,000 barriles por día (bpd) desde el mes pasado a 2.31 millones de bpd en junio, dijo la fuente.
La cifra global es más del doble que en el mismo mes del año previo, y la más alta desde enero del 2012, antes de la introducción de las sanciones, según datos de la Administración de Información de Energía de Estados Unidos (EIA).
Las exportaciones a Europa en junio se recuperaron a cerca de 580,000 bpd, frente a 530,000 bpd en mayo y casi seis veces más que el nivel previo al retiro de las sanciones, según la fuente. Antes de las sanciones, Irán enviaba casi 2.2 millones de bpd de crudo y Europa recibía cerca de 600,000 bpd, según la Agencia Internacional de Energía (AIE).
El reingreso de Teherán al mercado petrolero ha agudizado las tensiones con su rival Arabia Saudita y ayudado a impedir los esfuerzos de la OPEP por limitar la producción para impulsar los precios del crudo.
En tanto, la producción de crudo de Irán alcanzó los 3.8 millones de bpd, dijo el martes el ministro iraní de Petróleo, al destacar que Teherán ha logrado superar los 2 millones de barriles por día en exportaciones.