La AIE, que representa los intereses de los países consumidores, prevé que ese aumento permita alcanzar un equilibrio en el mercado del crudo en el segundo semestre de 2017.
Para 2016, la AIE vaticina un aumento de la demanda de 1.3 millones de barriles al día (mbd), frente a los 1.2 mbd de su última previsión. En 2017 el aumento sería de la misma magnitud, hasta una producción total de 97.4 mbd.