Los ministros de Energía ruso Alexandre Novak y de Recursos naturales saudí Khaled al Faleh firmaron al margen de la cumbre del G20 en China una declaración común calificada de "histórica" por Novak.
En ella "reconocen" la necesidad de "una cooperación estrecha entre los principales países exportadores para apoyar la estabilidad del mercado", según el texto divulgado en Moscú por el ministerio ruso.
"De hecho, hoy abrimos una nueva era en nuestra cooperación", dijo Novak, quien reconoció que hace dos años que los países implicados, entre ellos Venezuela, intentan "equilibrar" el mercado.
HUBO UN FRACASO
Arabia Saudita, jefe de fila de la Organización de países exportadores de petróleo (OPEP), y Rusia, que no pertenece al cártel, anuncian la creación de un grupo de trabajo destinado a presentar "recomendaciones sobre las medidas y las acciones a tomar para garantizar la estabilidad y la predictibilidad del mercado".
Rusia y los miembros de la OPEP, cuyas economías se vieron muy afectadas por la caída del precio del petróleo, intentaron a principios de año acordar una congelación concertada de la producción, para poner fin a una oferta demasiado abundante.
Su reunión de Doha en abril se saldó con un fracaso debido a divergencias sobre si Irán debía participar en esa congelación.
En las últimas semanas Novak había indicado que consideraba inútil una congelación de la producción de crudo al nivel actual de los precios.
En cambio, el presidente ruso Vladimir Putin, dijo la semana pasada que era favorable a la medida y apeló a un "compromiso" entre países productores.