Petróleo Brasileño Sociedad Anónima (Petrobras), la mayor empresa de Brasil, anunció en un comunicado que la decisión es para consolidar su recuperación financiera.
Lo anterior debido a los graves problemas financieros que atraviesa la petrolera, después de que se destapara una red de corrupción que desvió al menos US$2.000 millones entre 2004 y 2014.
"La cartera de inversiones del plano prioriza proyectos de exploración y producción de petróleo en Brasil, con énfasis en aguas profundas", señaló el comunicado de Petrobras.
Agregó que "en las demás áreas de negocios, las inversiones se destinan, básicamente, a mantener las operaciones y los proyectos relacionados a la fluidez de la producción de petróleo y gas natural".
"En los próximos dos años estaremos concentrados en la recuperación de la solidez financiera de Petrobras, como una empresa integrada de energía que tiene foco en óleo y gas", señaló.
El presidente de Petrobras, Pedro Parente, indicó en el comunicado que para los próximos cinco años, "nuestra propuesta es que la empresa haya sido saneada, tenga padrones de gobernabilidad y ética incuestionables para sostener una producción creciente".
La compañía prevé invertir US$60.600 millones en exploración y producción, unos US$20.000 millones menos que los previstos anteriormente.
El sector de refinación y gas natural, a su vez, registrará inversiones por valor de US$12.400 millones.
El plan de desinversión contempla vender activos de la compañía por valor de US$19.500 millones.
El objetivo de los gastos, en tanto, es reducirlos en 18 por ciento hasta 2021, para llegar a US$126.000 millones en los próximos cinco años.
La grave crisis que atraviesa Petrobras hizo que la compañía redujera las inversiones previstas en los últimos años.
El plan de negocios y gestión para 2014-2018 contemplaba inversiones por US$220.600 millones, valor que se redujo a 130.300 millones para el período 2015-2019.
Posteriormente, este valor se redujo a 98.400 millones de dólares, es decir, registró una disminución de 24,5%.