Los sindicatos aceptaron un esquema “inédito” de trabajo mensual de 14 días de trabajo pagos, 7 días de franco y 7 días de suspensión sin percepción de haberes por disminución de actividad. Esta modalidad de suspensiones sin goce de sueldos, aceptado por los gremios a cambio de preservar los puestos de empleo podrían replicarse en otras actividades industriales con altibajos, y se ha transformado en un precedente.
A principios de diciembre y mientras el Ministerio de Energía y Minería discutía con las empresas petroleras un nuevo precio sostén del barril interno, la petrolera estatal YPF comunicaba que daba de baja 33 equipos en Neuquén que estuvieron sin operar durante todo 2016, lo que significaba la pérdida de 1700 puestos de trabajo de contratistas.
Diagrama de 2×1
Los sindicatos lanzaron un plan de lucha que culminó en una intervención del Ministerio de Trabajo que dictó la conciliación obligatoria hasta el 1º de enero. Con el escenario de la flexibilización laboral que piden abiertamente las petroleras y el Gobierno, hace unos días YPF logró encontrar una salida al entuerto firmando un acuerdo por seis meses que se acerca a lo que se busca implementar en Vaca Muerta.
Según reveló ayer El Cronista, el entendimiento firmado por YPF, la provincia, el Ministerio de Trabajo con los Sindicatos del Petróleo y Gas Privado del Chubut y del Personal Jerárquico y Profesional de la Patagonia Austral en donde las partes acordaron “implementar a partir del 1º de enero de 2017, para todos los trabajadores que presten servicios en áreas operadas por YPF S.A. y/o formen parte de los turnos en equipos de torre que hoy se encuentran realizando un diagrama de 2×1, un esquema de trabajo mensual de 14 días de trabajo pagos, 7 días de franco y 7 días de suspensión sin percepción de haberes por disminución de actividad. Asimismo, los trabajadores que prestan servicios en equipos de torre y que hoy tienen un diagrama de 1×1, se implementará un esquema de trabajo mensual de 10 días de trabajo pagos con permanencia, 10 días de franco y 10 días de suspensión sin percepción de haberes por disminución de actividad”.
Productividad
“Si eso se cumple se va a poder mantener actividad y niveles de producción en Chubut. Los de Neuquén siguen en conciliación obligatoria”, explicó una fuente que sigue de cerca los avatares de la industria. En total, en la provincia hay cuatro equipos de perforación, diez de workover y ocho de pulling, en total son 22 equipos de torre que tiene YPF.
De esta manera, la provincia gobernada por Mario Das Neves será un primer caso testigo de los cambios que buscan introducir en especial en Vaca Muerta. “Lo de Neuquén –Vaca Muerta– va mucho más allá, pero todo va en línea de mejorar la productividad y alinear los costos el precio del barril que se viene”, explicaron en off the récord desde una compañía del sector.
Licitaciones
Respecto a Vaca Muerta y la intención de reactivarlo, mientras se espera algún tipo de definición respecto del Plan Gas Plus que culmina en 2017 y que los gobernadores piden extender, Neuquén anunció que licitará seis bloques petroleros en Vaca Muerta que se encuentran en manos de la petrolera Gas y Petróleo del Neuquén (GyP).
La intención de la provincia es conseguir inversores de los Estados Unidos por lo que el titular de la estatal GyP, Alberto Saggese, explicó al diario Río Negro, que representantes de la firma viajarán a Dallas, EE.UU., en enero con el objetivo de buscar inversores.
Los yacimientos licitados son el bloque Parva Negra Oeste, Cerro Arena Sur, Las Tacanas Norte, Bajo del Toro Este, Aguada de Castro Sur, Aguada de Castro Norte y La Tropilla 1. Varios de estos campos son porciones que devolvió YPF.