El presidente de Ecuador, Rafael Correa, que afronta la oposición de un sector indígena a la explotación petrolera y minera, ofreció el sábado aumentar las rentas del petróleo a los municipios amazónicos que apoyen la extracción.
Actualmente, el Estado entrega un dólar por cada barril de petróleo extraído en la Amazonía a los gobiernos locales de la zona. Correa ofreció subir la renta a "dos dólares" por cada barril a aquellos municipios que respalden la actividad petrolera.
"A los que firmen (...) se les darán esas rentas adicionales", dijo el gobernante durante su programa semanal de radio y televisión desde la provincia de Cotopaxi (sur).
El mandatario consideró una "contradicción" de los dirigentes indígenas que exijan el aumento de las rentas petroleras y al mismo tiempo se opongan a la explotación del recurso.
Correa anunció en agosto de 2013 su decisión de explotar los depósitos de crudo en los campos Ishpingo, Tambococha y Tiputini (ITT), localizados en la reserva Yasuní (este) y calculados en 920 millones de barriles.
Tras su decisión, el presidente se ha enfrentado a protestas por parte de grupos ecologistas y un sector indígena que se oponen a la explotación de crudo en la Amazonía y que fracasaron en su intento de frenar la producción petrolera en Yasuní mediante un referendo.