“Lo que queremos no es solo un tema de flexibilizar las regalías, tenemos que buscar la forma de cómo adaptar el marco regulatorio para la inversión petrolera a un contexto en el cual el precio internacional del crudo ha caído”, subrayó En los últimos cinco años el petróleo West Texas Intermediate (WTI) alcanzó un pico de US$110 el barril en marzo del 2013 para descender a un mínimo de US$26,21 en febrero de este año y hoy cerró en US$48,62. El ministro Tamayo refirió que el precio del petróleo está siendo afectado por cambios derivados en el mercado de hidrocarburos a partir del shale gas y el shale oil (gas y petróleo de esquisto) con efectos a nivel global. “Lo que tenemos que ver es cómo la legislación de hidrocarburos busca fomentar la inversión. Estamos trabajando (el nuevo marco regulatorio) y calculo que debemos tenerlo listo entre cuatro y seis meses, ojalá antes”, indicó. Exportación de gas a México. De otro lado, manifestó que está en proceso el diálogo sobre la exportación del gas de Camisea a mercados diferentes al de México para tener mejores ingresos. “Estamos buscando efectivamente que dependamos menos de lo que es la exportación del gas a México. Estamos conversando con toda la cadena buscando que el esfuerzo de las empresas sea complementado con la labor del Estado (peruano) en conversaciones con el gobierno mexicano”, dijo. En ese sentido, refirió que está convencido de las buenas perspectivas para lograr un contrato orientado a la exportación a otros mercados más favorables para el Perú. “Sí, creo que hay buenas perspectivas”, afirmó. Oleoducto afecta canon. Por otra parte, señaló que la falta de operación del oleoducto norperuano afecta “la columna vertebral de la economía” de la selva, porque detiene la actividad petrolera en Loreto, que finalmente contribuye con el canon petrolero. Indicó que esta situación afecta al desempeño del PBI nacional y limita los ingresos de los gobiernos regionales y locales que reciben canon, porque si no se extrae petróleo no hay regalías ni se pagan impuestos. Asimismo, refirió que las empresas petroleras de Loreto han dejado de contratar personal y las protestas están utilizando esta situación de manera poco responsable. “El tema está siendo utilizado, en algunos casos, de manera poco responsable con situaciones que interfieren con el libre tránsito y la circulación de las personas en las vías fluviales. Esa circunstancia constituye obviamente una infracción a las normas legales”, puntualizó.